Plásticos de Cultivo
Plásticos para el cultivo en interior
Las láminas de plástico son un gran aliado del cultivador de marihuana en interior. Ya sean plásticos reflectantes para forrar paredes, plástico anti-fugas para cubrir el suelo, plásticos metalizados para aislante térmico anti-detección e incluso plásticos opacos para tapar ventanas, dividir salas o fabricar armarios caseros, aquí encontrarás todo tipo de plásticos para cultivo interior a los mejores precios.
Plásticos reflectantes, antifuga y antidetección
Los plásticos reflectantes permiten que la luz que se pierde en las paredes del cultivo sea devuelta hacia las plantas, convirtiéndose en luz útil que se aprovecha de nuevo.
Los plásticos reflectantes se diferencian por el tipo de superficie reflectante que emplean, la cual puede tener entre 80% y el 98% de poder de reflexión.
La otra característica que diferencia a los plásticos en general es el grosor, que se mide en galgas.
Para forrar una pared no es necesario que el plástico sea grueso (entre 200 y 400 galgas) mientras que para crear una pared de separación o cubrir una ventana se necesita cierto grosor y resistencia que asegure la opacidad (entre 400 y 600 galgas) y, por supuesto, para cubrir el suelo formando una balsa que retenga el agua y soporte el pisado constante, se necesita un gran grosor de unas 1000 galgas.
Para fijar estos plásticos a la pared lo mejor es hacerlo con cinta tipo americana y, sobre la cinta, reforzar la sujeción con grapas.
Entre los plásticos útiles en el cultivo encontrarás:
– Plástico Blanco y negro. Está formado por una capa trasera de color negro y una superficie delantera blanca brillante que tiene en torno a un 80% de reflexión. El plástico blanco y negro se vende en metros lineales con dos metros de ancho (1 x 2m). Es un buen reflectante, aunque no sea el mejor, y si lo que necesitas en un plástico reflectante barato para cubrir las paredes, el de 350 galgas te servirá perfectamente. Pero su mayor utilidad –gracias al ancho de dos metros y gran resistencia- está en la posibilidad de cubrir ventanales para evitar fugas de luz, crear con él paredes divisorias en la sala o incluso hacer armarios caseros, para lo cual es ideal el plástico Blanco y Negro de 500 o 600 galgas.
– Plástico reflectante Mylar. El Mylar (marca comercial) es un plástico reflectante metalizado cuya superficie de espejo brillante logra valores de reflexión en torno al 95%. Se vende en metros lineales con 120cm de ancho. Como reflectante resulta muy eficaz, aunque requiere cierto cuidado en su colocación ya que es muy fino (unas 100 galgas) y se rasga si no se manipula adecuadamente. Para solucionar el problema de resistencia a los tirones -y mejorar la opacidad- existe el Mylar Negro que está reforzado con una capa trasera de plástico negro para otorgar mayor resistencia y grosor (200 galgas aprox.)
– Plástico Antifugas. Son plásticos de un grosor mayor que pueden utilizarse para proteger el suelo y evitar derrames y fugas. Su grosor permite colocarlos en el suelo y pisarlos sin que se rompan. Dependiendo de su grosor tendrán una mayor durabilidad.
– Plásticos Antidetección. Se componen de varias capas de materiales aislantes como el aluminio y el PVC, y su capacidad de aislamiento permite «camuflar» la temperatura interior de la sala de cultivo de cámaras térmicas. Existen distintos productos con mayor o menor capacidad de aislamiento.
– Mallas de Ocultación. Las mallas de ocultación se utilizan en exterior para camuflar nuestras plantas de miradas indiscretas. Las puedes encontrar en distintos colores y con distintos niveles de opacidad.